Cuaderno de bitácora en el que narro mis salidas y viajes en moto.
Frank el Navegante.

martes, 16 de febrero de 2016

Rincones murcianos

Aprovechamos unos días libres entre semana para ir a visitar la Región de Murcia. Algunos rincones que tengo desde hace tiempo localizados, pendientes de una oportunidad como esta.

Comenzamos la mañana del lunes, 10:20h, tomando el teletransporte (la autovía) hasta la Font de la Figuera, de allí por Yecla y Jumilla a Cieza, donde nos adentramos en sus bonitas montañas.

Vamos en busca del embalse de Quípar, o de Alfonso XIII. Al poco de comenzar la solitaria carretera veo un letrero que indica que la carretera del pantano está cortada al llegar a la presa. No importa, seguimos para ver el embalse aunque nuestra intención inicial era superarlo y ver, más allá de él, las antiguas salinas de la Ramona.

Bien hacemos, pues, la zona del embalse es espectacular

Muy bonito, con estas luces cambiantes que el viento y las nubes nos ofrecerán todo el día

Poco más adelante, en las puertas abiertas de la zona de la presa, un letrero indica el prohibido el paso... Nos adentramos un poco, hasta la propia presa, y aunque no parece haber problema en la carretera decidimos no aventurarnos más allá y volvemos por donde vinimos...

Buen paisaje el que transitamos

Almendros en flor con el pico Almorchón tras ellos. Casi parecía un paisaje Japones

Ahora seguimos por otra secundaria hacia Bullas

Esplendidas pequeñas sierras salpican los paisajes murcianos de interior

El siguiente rincón que visitamos es el Salto de Usero, en Bullas

 La cascada vista desde arriba, desde el pequeño puente

No es muy alta, algo más de un par de metros

No es su altura su belleza, sino el lugar donde está

Bajamos siguiendo el camino en perfecto estado

Desde aquí ya se aprecia el paraje en todo su esplendor

Espectacular la cascada y la poza que ha formado bajo las rocas el río Mula

Las imágenes hablan por sí solas

Genial lugar para tomar el baño en verano, sin duda


Comimos allí mismo, refugiados del viento. Bocadillo de atún con olivas

Una artística antes de irnos

Ahora, con calma, unas imágenes desde arriba, pero desde debajo del puente

Aquí, a la izquierda abajo, el salto visto justo desde arriba

Gran paraje, del que disfrutamos a nuestro antojo.

Nos despedimos del correr de las aguas

Y continuamos hacia nuestro siguiente destino del día, el cercano castillo de los Vélez, en Mula

Si bien la fortaleza original es anterior al S. XII la que se contempla hoy en día es del S.XVI

"Como curiosidad, dada la prohibición de edificar nuevas fortalezas que no se levantaran en anteriores cristianas, impuesta por los Reyes Católicos y Carlos I, el marques de los Vélez falseo una tumba romana en la antigua torre del homenaje para obtener el permiso. Hecha la ley, hecha la trampa"

Algunos de los escudos

El acceso al castillo, de propiedad privada, no está permitido. Lleva cerrado más de una década. Aunque hay un movimiento para obligar a la familia a cumplir con la ley de patrimonio y permitir su visita una vez a la semana

Continuamos nuestro camino, tomando dirección a Alhama de Murcia.
Ahora, cerca de Gebas tomamos una pista que nos adentrará en el Paisaje protegido de los Barrancos de Gebas.

¡Sencillamente espectacular!

Vamos avanzando en dirección al embalse de la rambla de Algeciras 

Paisajes que nos transportan a marruecos

Dignos de dejar aparcada a Scipiona y retorceder a pie la pista para echar un gran foto del lugar


Poco a poco vamos acercándonos al agua

Hasta que llegados a una bajada con el terreno pedregoso y suelto, por prudencia, por no ver más allá de una curva, decidimos no continuar.

Las luces del día ventoso siguen jugando con el paisaje

Y lo mismo la luz está aquí

Que allá

Peculiar paisaje sin duda
 
Un vistazo a la sierra de Espuña, que mañana visitaremos

No todas las partes de los barrancos están peladas. Alguna ladera tiene árboles

Al fondo la presa

"Mis dos bellas"

Magnífico lugar este.
Volvemos por donde vinimos, con susto incluido jajaja... que pillé una rodera mirando el paisaje y por poco volcamos, acabamos haciendo medio trompo.

La tarde cae, pero como aun nos queda un rato de luz, en vez de ir directos a buscar el hotel, tiramos por una carreterilla que va hacia la presa en busca de un mirador al embalse

Panorámica



Una última a los barrancos de Gebas. ¡Que guapada de lugar!

Disfrute de día, del que tan sólo podemos quejarnos del viento, que hace las visitas un poco cansadas, todo el rato buscando donde escondernos de él. Por no hablar de lo pesado que acaba siendo ir en la moto con viento... Por lo demás, grandes rincones los que hemos visto.
Fuimos al hotel los Bartolos, en Alhama, en busca de descanso. Ni siquiera salimos del hotel, pues tienen restaurante.
El hotel bien, el restaurante mejor. Cenamos de menú, rico rico, y buena cantidad.


El martes amanecemos en Alhama. Desayuno, liquidación y en marcha.
Tras repostar nos vamos a ascender la sierra de Espuña.
Buena sesión de tornantes, jejeje... ni que estuviéramos en los alpes!


La primera parada la hacemos en el mirador del collado Bermejo

De allá abajo venimos

En la distancia, con mucho zoom, los barrancos de Gebas y el embalse

Al otro lado del collado

Llegamos a ver la nieve sobre la cumbre de la sierra de María, ya en tierras almerienses

Continuamos ascendiendo el morrón de Espuña. Nos cruzamos con un furgoneta y me parece que ambos ocupantes van vestidos de militar...

Casi llegando arriba del todo

Paramos en el cartel del prohibido el paso. Al momento, la misma furgoneta vuelve a subir, pasando de largo junto a nosotros. Nos preguntamos si habrán subido para ver si nos habíamos colado... Quién sabe.
Una pena no poder disfrutar del paisaje desde arriba del todo, junto al observatorio E.V.A 13.

Nos conformamos con un vistazo desde aquí. Allá abajo, los espectaculares Barrancos de Gebas siguen llamando nuestra atención

Retrocedemos por donde vinimos. Bajando solo un poco para parar junto a un mirador, donde dejamos a Scipiona y nos hacemos una pequeña caminata.

Andamos hasta un par de neveras, pozos de hielo

Esta es una zona repleta de estos pozos...
Vistazo al interior de uno de ellos

Continuamos el camino en busca de uno restaurado

Letrero explicativo

Autofoto. Buen sol y nada de viento ¡Aleluya! Aunque frio hacia un rato...

El interior, lo han reforzado con vigas

Visto desde el otro lado

Autofoto


Buen paseo nos dimos. Volvimos a la montura, y tiramos para abajo.

Paramos en la carretera para hacer la foto del Mediterraneo asomando sobre las montañas

Gran bosque, repoblado hace apenas cien años

Bajamos hasta el collado Bermejo y continuamos atravesando la sierra hasta llegar al collado del Pilón.

Desde aquí, un vistazo al Morrón de Espuña

Y al otro lado vemos por donde nos llevará el camino

Allá abajo, en la distancia, Aledo. Pueblo que después bordearemos

Y más lejos aun, nuestro siguiente destino, la costa






Continuamos bajando hasta estar junto a Aledo


Tomamos poco después el teletransporte hasta la costa. Pues no vale la pena llanear por secundarias entre campos.

Acabamos en la bahía de Mazarrón

Venimos a ver las Gredas de Bolnuevo

"Las Gredas son de arenisca formada por diversa macrofauna de moluscos y crustáceos en el Plioceno (hace 4 millones de años), modeladas desde entonces por el viento y el agua"

Otro "pequeño" gran rincón de Murcia


Sol, playa y extrañas formaciones



Continuamos camino ahora hacia Mazarrón puerto. Allí, obligados por vallas que impiden el paso "natural" por la población, y tras un poco de lío, consigo llegar hasta unas vistas que buscaba.

La isla de Mazarrón


Continuamos bordeando la costa hacia el norte. Hay hambre y decidimos comer de menú, en Isla plana, en la costa.
Hay que decir que en esta época la zona está bastante solitaria, una gozada, y que los que comían junto a nosotros, en la terraza al sol, eran todos o ingleses o alemanes.

Bien comidos y reposados, continuamos hacía Azohía (buenos lugares de costa hubiéramos encontrado aquí también donde comer).

¡Unos barcos vikingos! jejeje...


En el paseo de Azohía

Al fondo, la torre de Santa Elena

Recorremos la costa hacia la torre, pero una vez pasado el pueblo la calle que va a la torre está cortada y nos vemos obligados a aparcar allí mismo. Bueno, habrá que pasear un poco y rebajar la comida.

Aprovecho para una panorámica de la bahía

Esta es una reconocida zona de buceo, algún barco dedicado a ello lo atestigua

Casi unos 500m. después, llegamos a la torre


Su historia

La "visitamos"

Poco, pues, la puerta de entrada está cerrada con una cadena, lastima

La escalera de caracol es puro óxido

Un contra luz, con el mar de fondo

Hay también un mirador, con alguna construcción poco aprovechada

¡Que vistas!


Autofoto, aprovechando este magnífico fondo

El mar está perfecto

Unas gaviotas

Tras un rato disfrutando del lugar y las vistas toca seguir ruta y volvemos por dónde vinimos.

Scipiona nos espera

Ahora nos vamos al cercano cabo Tiñoso, en busca de la Batería de Castillitos.
Tras una sinuosa carretera llegamos al aparcamiento, desde donde ya se contempla la Batería y se aprecia uno de sus cañones. Rondan las 17h

De nuevo a pasear

Es una lastima ver lo desaprovechado que tienen todo este patrimonio, declarado bien de interés cultural. En otro país estaría arreglado, publicitado y sacando un pequeño beneficio para su mantenimiento y dando trabajo a más de uno de la zona...  en fin, spain is diferent



"La Batería fue construida entre 1933 y 1936, aunque el proyecto era de 1926 de la dictadura de Primo de Rivera, como parte de la protección de Cartagena.
Castillitos fue dotada de dos cañones de 381 mm. con potencia para disparar piezas de casi una tonelada a 35 Km. Durante la guerra civil realizo una descarga contra la flota del bando sublevado en abril de 1937.
Estuvo en uso hasta 1994. Después sufrió abandono hasta que en 2009 el Ministerio de Medio Ambiente restauro la fortificación y la hizo visitable"

Dirección de tiro

Ascendemos

Y podemos apreciar los cañones



Y, cómo no, nos hacemos un montón de fotos con los gigantescos cañones (hoy en día inutilizados)





"¿Un poco más alto? Ná, ya lo levanto yo" jejeje...

Autofoto

Y acabamos con una artística de este pequeñin

En la distancia, continuando el camino hacia el borde del cabo, podemos ver la Batería de Jorel, la cual no visitaremos dadas las horas que se nos están haciendo (como tampoco la anterior a Castillitos, la de Atalayón, que además carece de sus cañones)


"La de Jorel, perteneciente al mismo plan de defensa de la base naval de Cartagena, cuenta con un par de cañones de 152 mm."

Cañones que fotografió desde la de Castillicos

 
En la lejanía se aprecia la zona residencial del pueblo El Portus, situada en una ladera con vistas a las Baterías

Una zona atrincherada

El sol va cayendo y parece que hasta las modernas gárgolas bostezan

Toca retirada, volvemos junto a Scipiona mientras el sol comienza a perderse cercano al horizonte

Tiramos rumbo a Murcia ciudad, por secundarias, que es tarde pero no tanto como para necesitar la autovía.
Cerca de Murcia nos alojamos en un hotel restaurante colindante a una gasolinera. Alojamiento barato, habitación normalucha en la que tuvimos que dormir con el aire a tope toda la noche para no morir de frío jajaja... Y cena espectacular, hoy a la carta. Ensalada de la casa y pescado.


Miercoles, último día.
Desayunamos en el propio hotel y después tiramos de teletransporte para evitarnos Murcia city, hasta Archena.

Hoy nos vamos a ver el Valle de Ricote, en el que hay más de una estampa digna de parajes más lejanos, de paisajes marroquís.

Más tarde, camino a casa un último rincón curioso de la región. Y después una curiosidad histórica, ya en la provincia de Alicante.


Dejamos Archena a un lado, para ir hacia Ulea por la carretera del balneario, en busca de la torre del Gurugú

Es una pena que el acceso este cerrado, por peligro... Y eso que se restauró en 2002.

Así que tenemos que conformarnos con fotografiarla desde los alrededores

 
La Torre del Gurugú, una casa de aperos, fue levantada en 1870 por D. Antonio Tomás Sandoval, un militar uleano que participó en la batalla de Marruecos, a semejanza de la existente en el norte de África y utilizada como puesto de vigilancia


Las vistas del valle bien podrían pasar por zonas húmedas de marruecos ¿No?


La última foto, a esta bonita y curiosa torre, se la hacemos desde la distancia aprovechando el zoom.

Continuamos por el valle, pero no por la carretera principal sino por un caminillo que nos lleva a un mirador, el del salto de la novia

Se dice que una novia cristiana, tras morir su novio a manos de un moro que la pretendía, huyo por aquí a caballo, saltando el río Segura

Un vistazo atrás

Más adelante volvemos a tener esa sensación de estar en marruecos. Palmeras, casa con techos abobedados...

Puente colgante sobre el Segura

Otro espejismo marroquí

Y otro más, más adelante, ahora ya por la carretera principal, camino de Blanca

La mejores imágenes del valle son en dirección sureste, pero al ser por la mañana hay un fuerte contra luz

Ya en el pueblo de Blanca vamos en busca del mirador... consciente de que no voy a conseguir la foto que vengo a buscar... Bueno, la próxima vez vendré por la tarde jajaja...

Azud de Ojos desde el mirador del Alto de Bayna

Abandonamos el valle de Ricote, un pequeño tramo de autovía, y tiramos en dirección a Fortuna y Pinoso.

Entre ambos vistamos la curiosa carretera abandonada, a ninguna parte va, que por una pintada se ha ganado el nombre de Route 66

Buena sesión de fotos nos echamos


Hay que reconocer que el lugar es curioso, y pasando cerca (casi adrede) pues había que visitarlo

El pequeño viaje va concluyendo, y vía Pinoso, Villena, vamos tirando para casa.

Paramos en la ermita de San Bartomeu, en Camp de Mirra

En este lugar, en la torre de la ermita -lo único en pie que queda del castillo-, se firmó el tratado de Almizra en 1244. Pacto entre Jaime I y Alfonso X (entre la corona de Aragón y la corona de Castilla) en el que definían las fronteras del Reino de Valencia

La torre vista desde los restos del castillo

Un pozo y una Dakariana

Y allí mismo, sentados al sol en unos bancos, nos hicimos un bocata para comer acompañado de una cervecita. Contemplando el castillo de Biar en la lejanía

La vuelta por Ontinyent con mucho frío y en casa a tiempo de echarnos una siesta.

Para ser casi un pensat y fet (pensado y hecho), basándome en unos cuantos wpts (lugares) coleccionados con el tiempo, nos salió una gran ruta por bonitos y curiosos rincones murcianos.
Y al final con tan sólo 800 Km. recorridos.

1 comentario:

  1. Muy original recorrido murciano y una estupenda crónica. Gracias por compartir. V´sssssssssssssss

    ResponderEliminar